Unas horas
antes de escuchar el mensaje presidencial:
Estamos
a puertas de completar la cuarentena – esta vez no creo que
Vizcarra la amplíe, a pesar de que el panorama mundial no es el
optimo – Como será la vida ahora, es otro tema. Por lo pronto, nos
tenemos que hacer a la idea que las máscaras han venido a quedarse.
Los padres del colegio de mis hijos ya están comprando mascaras de
superhéroes para los niños, así que el mercado de máscaras se
encuentra más pujante que nunca. Decidir que hacer con los chicos,
si los debemos sacar estos días, pues creo que todavía no. Con el
miedo que están metiendo por el Síndrome de Kawasaki, no me da nada
de ganas de llevar a mis hijos al parque. Ellos quieren ser libres y
correr nuevamente (obvio), ir a la casa de sus primos, al colegio, al
parque del reciclaje y a los juegos en el parque de la vuelta. Nada
de eso se va a poder hacer y no se sabe hasta cuando.
Las
clases virtuales ya están tomando más forma. Los colegios
particulares no han bajado mucho la pensión, pero a pesar de ello ya
nos estamos acostumbrando a conectar a los chicos y hacer las tareas
que les dejan. Nunca fui bueno en Formación Laboral, por fortuna
tuve una madre a la que le gustaban las manualidades y me ayudaba en
todo. Alguna profesora me lo sacó en cara, pero no le hacía caso.
La pendeja de la profesora me quería jalar, pero no podía demostrar
que mi mamá hacía las costuras y los porta lapiceros con conos de
papel higiénico. No obstante, Ahora soy un genio en
manualidades. Como no serlo cuando todos los días piden que haga
algo diferente y si las profesoras no piden, mis hijos quieren hacer
algo con cartón, goma y colores. No puedo negar que disfruto
haciendo esas cosas. Me desconecta del mundo y me hace recordar mucho
a mi viejita arreglando mis trabajos, mojando el papel del baño y
dándole color, haciendo engrudo para pegar cuando no había goma,
cosiendo muñecos de tela y preparando disfraces. Te amo mamá
aunque cada vez lo diga menos.
Entonces,
hoy en unos de mis actos como “Padre
el Año”, hice una armadura para mi hijo menor.
Rodri (EL CHINO) es fanático de los superhéroes, fan a morir del
Hombre Araña y de los Avengers (me of course). Sólo un poco fan de
la liga de la Justicia, porque sabe que me gusta y porque cada vez
más le gusta Batman. CSM Batman, el maldito caballero de la noche,
por siempre serás el mejor superhéroe aunque no tengas súper
poderes ¿que te hace genial? Debe ser que eres un tremendo hijo de
la gran verga, súper inteligente, el mejor detective y el líder de
toda esa bola de poderosos superhéroes de la Justice League. Ni
siquiera Tony Stark (I am Ironman), Bruce Wayne es otro lote, es un
personaje conflictuado, medio negativo, pero con un sentido de la
justicia por encima de los demás. Por eso te perdonamos (y
envidiamos) que hayas tenido un hijo con Talia Al Ghul. Fucking Yeah
baby.
Me
salí un poco de la historia, sorry. Hice la armadura, primero el
pecho y la espalda, luego corté un
media luna para
que entre la cabeza de
mi hijo y
no le
incomode.
Luego hice cada uno de los brazos y los pegué a los hombros – por
supuesto cada brazo debía ser articulado, faltaba menos.
Al final le puse un circulo en el pecho, imitando un Arc Reactor. Que
puedo hacer también soy fan del señor Stark, pero por Robert Downey
Junior. Mi hijo quiso ponerle unos tentáculos que el había hecho –
para que sea el Iron Spider – se los puse, luego le puse la
armadura y me dijo “papá no lo puedo superar”. Estas
cosas pagan el cansancio y el sacrificio que hacemos (en
ocasiones)
los papás.
Después
mi hija le hizo un puñal, unas espadas y un escudo, haciéndome por
breves instantes un papá realizado. Limpié mis lagrimas y seguí
haciendo otras cosas.
Cuando
era un niño mi papá siempre estaba ocupado – lo cual es lo normal
porque los padres deben proveer –. El que se encargaba de hacer
cosas para mi y enseñarme unas cuantas travesuras era mi abuelo, el
viejo Julio. Él me hizo un avión de cartón, la tabla de mi skate
cuando la original se rompió, una cerbatana con un tubo de PVC y
dardos de papel sellados con engrudo – la punta se pone más dura y
vuelan mejor – luego me enseñó a lanzarlos muy lejos. Con mi
abuelo salía a caminar a la calle, lo acompañaba a todas partes,
primero porque mi madre le encargaba que me cuide y luego – cuando
se hizo mayor – porque mi madre se preocupaba por él, sobre todo
en los días que cobraba su pensión de jubilado. Lamentablemente los
viejos son un blanco fácil. Mi abuelo fue pintor y artesano, me
gustaba mucho ver como trabajaba en su taller, siempre concentrado en
lo que hacía. Mi mamá decía que era medio flojo y le gustaba dejar
las cosas a medias, por eso ella siempre lo recriminaba y hacía que
mejore sus acabados. Ahora cuando hago algo para mis hijos, pienso
también en mi abuelo y lo extraño. Me hubiese
gustado que conozca a mi hijo menor y lo quisiera tanto como me
quiso. Lastima que la vida deba ser así, alguien se va y viene
alguien nuevo, lo nuevo se vuelve viejo y lo viejo se vuelve
historia y todo se va sucediendo.
Quiero
volver indicar que estaba escribiendo este post, antes de escuchar el
mensaje del presidente, por eso quería terminarlo de esta manera:
“Ya
falta poco para que termine la cuarentena, poco más para que todo
vuelva a ser normal – o a lo que pueda llamarse normal. Con el
tiempo muchos olvidarán lo que pasó en este tiempo. El ser humano
tiene mucha capacidad para olvidar los momentos de pena, miedo o
desesperación. Luego sólo recordamos las sonrisas en el Facebook…”
Posteriormente
escuché a Vizcarrita y todo cambió dentro de mi (Añañauuu). La
cuarentena sigue por casi mes y medio más. Alegría, tristeza,
desesperación, sentimientos encontrados, la verdad es que no se que
putas sentir. Luego recibí una cantidad de memes abrumadora,
incluyendo la frase “tengan lista la receta para los panetones, por
si acaso”. Que es lo que ha cambiado, vamos a tener futbol y un
poco más de delivery (PERIOD). El pollito y el chifa de mis hijos
esta asegurado, UFFF. A esto se le ha bautizado con el nombre de Fase
II, nomas para que tenga un nombre digno del Marvel Cinematic
Universe. Ignoro si han recordado que la mayoría de los peruanos son
informales y no tienen un sueldo (READ BETWEEN THE LINES DEAR
PRESIDENT). Ignoro si han pensado que muchas empresas no van a llegar
al 30 de junio, porque no funcionan vía delivery y la cuarentena las
está matando lentamente. También ignoro que van a pasar con los
proyectos petroleros y mineros, que va a ser de los dueños de
lugares de sano esparcimiento (BARES), del personal de apoyo de miles
de negocios, de los jaladores de Gamarra, de los SUPERVISORS de
Central y los Portales que van a estar patitas en la calle. Sólo por
decir unos cuantos, no todos van a poder reinventarse… creo.
THE
HOPE IS STILL THERE. Desde
lejos espero con ansias la Fase III, la IV, la V y
las que vengan. Maldito virus
chino de mierda, sé que muchos quieren decir eso pero
se contienen. HOY
NO CARAJO, vamos salgan a la
ventana y en lugar de aplaudir a al Policía – Y
QUE SEA SOLO POR UNICA VEZ –
peguen un fucking grito que retumbe en los cielos y hasta el fondo de
las fosas marianas. CORONAVIRUS Y TU REPUTISIMA MADRE, HIJO
DE CIENMIL PUTAS (como insultaba mi abuelito a quien Dios tenga en su
gloria). Después sigamos la
cuarentena hasta el fin, cocinen, rían, pongan su mejor cara. Todo
se acaba
un día a la vez, incluso
esta larguísima cuarentena.
TUPAQ
PD:
les dejo la canción de Bon
Jovi “It´s My Life”. Me gusta mucho y es una canción ligera que
me da esperanza.
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