UNA OPCIÓN DE TRANSPORTE ECOLÓGICA, ECONÓMICA E INTELIGENTE

Es triste ver en hora punta como están las calles y avenidas más transitadas de Lima, todas atiborradas de carros tocando el claxon, esperando con este sonido irrespetuoso hacer que otros conductores manejen mejor o les den espacio para pasar. Es lógico que habiendo superado ya hace unos años el millón de vehículos en Lima metropolitana, ni los semáforos ni los policías se den abasto, así que lo que le queda al pobre amigo conductor es renegar hasta llegar a su destino o tomar el aun peor sistema de transporte masivo – combis asesinas, el escaso metropolitano, el pobre corredor vial azul, o el envase de sardinas llamado Tren Eléctrico.

Hace tiempo que desistí de tomar una combi, soy un poco alto para ir parado dentro de esos transportes de la muerte. Tampoco tomo taxis porque en la mañana es difícil conseguirlos y es un atentado contra mi economía. Mucho menos voy en Metro o Metropolitano porque no hay ninguno que conecte mi casa con el trabajo. Afortunadamente vivo muy cerca de mi trabajo, lo cual es un beneficio insustituible a mi parecer. Vivir cerca del trabajo me ha dado la oportunidad de compartir más tiempo con mi familia, de comer más saludable en casa, de echarme al menos diez minutos en mi cama antes de volver a trabajar en la tarde, inclusive me permite comerme un helado y darme una vuelta por ahí para refrescar la cabeza y pensar en la inmortalidad del mosquito. El tiempo es el bien más valioso que tenemos y es en sí el único recurso intrínsecamente no renovable.

Debo aclarar que vivir cerca del trabajo no significa que puedo ir caminando, soy aún joven pero no para caminar al trabajo todos los días, además llegar sudado en tiempos de verano no es una opción, porque como muchas personas trabajo en una oficina donde es muy importante la pulcritud. Mi secreto es un scooter de 400 cc, con el que me muevo de aquí para allá y más allá. Mi scooter me hace independiente, es económico, es versátil, tiene caja para meter cierta carga (casco) y me da una sensación de libertad como imagino que sintieron los primeros jinetes de la historia de la humanidad. Ser motero es un placer muy recomendable.

Sin embargo, siendo más ecologista, comprometido con la naturaleza, últimamente me he interesado por las motos eléctricas. Si bien no hay mucha oferta de motos eléctricas en el mundo – aunque está en franco crecimiento - y menos en Perú, si es importante indicar que esta aunque pequeña es importante. Estoy convencido que las motos eléctricas y los vehículos eléctricos en general – pero principalmente las motos – son el sistema de trasporte de un futuro próximo. Para ser más didáctico aquí les expongo en que me baso para afirmar lo expuesto:

1. Las calles de Lima (y de todas las capitales del mundo) se encuentran congestionadas en hora punta, cada vez son más largos los tiempos de viaje debido a los embotellamientos. Las motos no generan embotellamientos, al menos no en la medida que lo hacen los automóviles, es decir son un medio de trasporte personal más eficiente. Aunque más eficiente serían los medios adecuados de transporte masivo.

2. Los combustibles son caros, a pesar de que el precio del petróleo esté bajo, los combustibles siguen siendo caros, por lo cual es mejor usar vehículos con un consumo menos de combustibles. En este sentido las motos consumen varias veces menos que los autos, sobre todo las motos de ciudad. Para el caso de las motos eléctricas, los motores eléctricos son mucho más eficientes que los de combustión interna, además la energía que consumen puede ser fácilmente cargada y es de menor costo que el combustible.

3. El costo de mantenimiento de una moto eléctrica es muy bajo, no necesitan cambio de aceite como las motos a combustión, sólo la revisión de frenos cada cierta cantidad de kilómetros.

4. El sonido generado por una moto eléctrica es prácticamente nulo. El mayor sonido lo hace al cortar el aire mientras se desplaza, porque el motor eléctrico sólo hace un zumbido de bajos decibeles. Para algunos moteros empedernidos esto sería una desventaja, muchos machos latinos prefieren el rugido del motor de una pistera, o el ronquido de una cruiser. Particularmente pienso que eliminar esos sonidos molestos es de lo más inteligente y amigable con el medioambiente. Un plus importante para mis amigos moteros es que la aceleración de una moto eléctrica es mayor, fácilmente llegan a los 100 Km/h en menos de 4 segundos (ver motos Zero, Evoke, entre otras).

Quizá la única desventaja de las motos eléctricas es la autonomía, la mayoría de marcas tiene un promedio de 100 Km. Sin embargo existen motos como Zero que pueden alcanzar más de 300 Km. de autonomía, aunque el costo de estas motocicletas está muy por encima de lo que podría pagar un trabajador promedio.

Imaginemos por ejemplo una capital de provincia donde se solucione el problema del ruido causado por las motos, me refiero a la capital de la selva Iquitos. Quien conoce Iquitos puede entender que en este paraíso tropical de día y noche se escucha el rugido de las motos, pero como es mejor una imagen aquí les dejo una:

Todos se transportan en motos y mototaxis en Iquitos, hay algunos carros por supuesto, pero la pasan muy mal entre tanta moto. Sé que es naive de mi parte pensar que de un momento a otro se va a cambiar de combustión a sistemas eléctricos, pero también sé que en el mediano plazo va a ser necesario.

Así que ahí está, salgan a comprar más vehículos eléctricos – es sólo un consejo – estoy seguro que va a ser más rentable para nuestros bolsillos y de paso vamos a proteger nuestro medio tan degradado. Aquí les dejo unos links de marcas de motos eléctricas, un par de Perú para los que estén interesados. También les dejo unas fotos:

ZERO MOTORCYCLES: http://www.zeromotorcycles.com/